La Universidad Nacional Madres de Plaza de Mayo celebró su 25° aniversario, en un contexto de fuertes desafíos para la educación pública y los derechos humanos en el país. Desde Radio Antena Libre, conversamos con Demetrio Iramain, quien reflexionó sobre este recorrido histórico, sus tensiones actuales y el legado que continúa vigente.
Iramain destacó estos 25 años en los que la educación se pensó no solo como un proceso académico, sino como parte de la construcción de memoria, verdad y justicia. Recordó cómo la universidad nació inspirada en la lucha de las Madres de Plaza de Mayo, no solo para transmitir conocimientos, sino para construir pensamiento crítico y compromiso social.
En un momento particularmente adverso para las universidades públicas, Iramain advirtió sobre intentos de desfinanciamiento, amenazas de intervención y el riesgo de creación de «universidades paralelas», que buscan diluir el sentido emancipador de la educación pública. Señaló que el Estado actual desconoce y ataca la institucionalidad de espacios como la Universidad de las Madres, un hecho grave para la democracia.
En el acto de celebración, la comunidad universitaria reafirmó su compromiso con la memoria activa. «El pañuelo blanco sigue siendo un símbolo de lucha y dignidad que no pueden apropiarse ni silenciar», expresó Iramain.
La Universidad de las Madres es hoy más necesaria que nunca: un espacio donde la pedagogía de la memoria se cruza con la defensa irrestricta de los derechos humanos, en tiempos donde resistir también significa educar, sostener la verdad y construir esperanza.