Tras hacerse públicas dos dununcias contra funcionarios neuquinos, el gobierno provincial presentó el “Protocolo para la Prevención, Intervención y Protección en Situaciones de Violencia Laboral en el ámbito del Poder Ejecutivo de la Provincia del Neuquén”. Desde La Revuelta (colectiva feminista) consideran que dicho protocolo debe modificarse, antes de ser aplicado.
Conversamos con Federico Egea, uno de los abogadxs patrocinantes de La Revuelta, quien comentó cuáles son los argumentos expuestos para solicitar al Gobierno neuquino que haga modificaciones al Protocolo, para que efectivamente sea de utilidad cuando su aplicación lo requiera.
«Lo que le planteamos al Ejecutivo es que había una necesidad de corregir situaciones de ilegalidad en el Protoclo, que estaban dadas, en principio, porque no preveía consecuencias sancionatorias para los autores de este tipo de formas de violencia, y en segundo lugar, por crear un diseño que no garantizaba ni la transparencia ni la adecuada protección de las víctimas» comenta Egea.
Desde la Revuelta se considera que este Protocolo es de carácter regresivo en materia de derechos, y de ser aplicado implicaría una revictimización de las personas denunciantes.
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Ph: Julia Burton para La Revuelta