En Bariloche vecinos y vecinas organizadas sin techo propio y muches sin trabajo deciden ocupar una manzana en el barrio 2 de Abril, un pedazo de tierra para construir sus casas, «Somos el Bariloche una y otra vez ignorado en las políticas públicas y no escuchado en nuestras propuestas» comunican. Son más de 100 familias.
Sebastian Mendoza, un vecino del asentamiento cuenta que lo decidieron en conjunto, «nos cansamos de promesas, estamos pidiendo un pedazo de tierra, no estamos pidiendo que nos hagan una vivienda» aclara ante las voces criticas.
para escuchar la entrevista recordá pausar el reproductor de radio en vivo.
Les vecines en febrero fueron a marcar los lotes para cada familia, la pandemia agudizó los problemas y muchas están sin trabajo, o no pueden pagar los alquileres, «no aguantamos más, es insostenible esto» comenta el vecino. Hoy permanecen en los terrenos y quieren desalojarlos.
Desde la organización de la toma expresan su preocupación:
«Nosotros afirmamos que quién ocupa recupera. Todos los barrios que nacieron de las tomas así lo reafirman. Cada lugar ocupado fue mejorado por las familias que nos instalamos: Nahuel Hue, Frutillar, 29 de Septiembre, Las 34 hectáreas que nacieron desde diferentes tomas, 3 Ojitos de Agua, barrio Inta, Lago Gutierrez, Jamaica, Llanquihue. Si hubieran esperado los planes de viviendas que nunca llegaron estarían en la calle».
Hoy al mediodía se acercarán a una audiencia porque les formularon cargos de usurpación, les esperarán el fiscal Soto y el Juez Calcagno, «tierra hay, no nos quieren dar la solución, está y está ahora. Esto no es en Bariloche, esto es nacional. Hay tomas en toda la Nación».
«Nos acusan de usurpadores, nos amenazan con la fuerza pública y nos judicializan por ocupar un territorio abandonado, mientras los sectores del poder económico sin ningún tipo de escrúpulo ni de límite por parte del estado, incendian miles de hectáreas de bosques autóctonos para abaratar su compra de la tierra, lotearla y armar barrios privados vendiendo cada lote a miles de dólares»
Sebastian es testigo y protagonista en la recuperación de tierras por parte de familias que no pueden acceder al pago de un alquiler o de un terreno en Bariloche, muchos de ellos son fiscales y están bajo el ojo de la especulación inmobiliaria. La falta de una planificación urbana que piense en los constantes desplazamientos migratorios, en el sucesivo incremento poblacional de muchas localidades y que integre a los sectores populares se transformó con los años en uno de los grandes derechos afectados en Argentina, la vivienda digna.