De cómo el negacionismo es en sí mismo, una catástrofe

En Todo Ese Aire, conversamos con el politólogo y docente de la Universidad del Comahue Gerardo Mujica, para analizar los eventos de Bahía Blanca, que además de tener un componente natural, también da muestra de una configuración política que hace agua en lo previsible.

Mujica consideró que «hay responsabilidades distintas» en lo que la clase dirigente considera que son «fenómenos imprevisibles» cuando se trata de estas catástrofes, que ya se han repetido en diferentes puntos del país, no sólo con temporales sino también con los incendios.

El politólogo afirma que el deslinde de responsabilidades de «que llueva tanto» es una forma de sostener la negación del «cambio climático, se está negando la crisis socioambiental, la crisis civilizatoria en la que estamos inmersos hace varias décadas.»

Sostiene que la negación del cambio climático, más la inconsciencia frente al nuevo contexto global, descarta la imprevisibilidad de algunos fenómenos. Y el accionar político (y los representantes de turno) no hacen más que reafirmar que lo sucedido en Bahìa Blanca era totalmente previsible.

Reproducir