Carolina Magnalardo, periodista de la ciudad de Neuquén es la única profesional acreditada desde Argentina para realizar la cobertura de la VII Copa del Mundo de Fútbol Femenino. Previo a su viaje y en comunicación con Antena Libre, esto nos decía: El evento comenzó el sábado 6 de junio y cuenta con la participación de 24 países que son divididos en seis zonas. El partido final está planteado para el 5 del mes próximo.
En el Grupo A participan: Canadá, China, Nueva Zelanda y Holanda.
Grupo B: Alemania, Costa de Marfil, Noruega y Tailandia.
Grupo C: Japón, Suiza, Camerún y Ecuador.
Grupo D: Estados Unidos, Australia, Suecia y Nigeria.
Grupo E: Brasil, España, Costa Rica y Corea del Sur.
Y en el Grupo F: Francia, Inglaterra, México y Colombia.
Uno de los conflictos que presentó este Mundial, fue el de la verificación de sexo que plantea la Federación Internacional de Fútbol Asociado(conocida como FIFA), ya que en el artículo 4 que son los Requisitos para jugar vinculados al sexo, plantea que «en las competiciones para hombres de la FIFA, solamente tienen derecho a participar hombres. En las competiciones femeninas de la FIFA, solamente tienen derecho a participar mujeres».
La manera de implementar el articulo 4, que rige desde el 2011, es verificar si el aspecto de la jugadora o del jugador se corresponden con los estereotipos de mujer o de hombre. Si no es así se someterá a la persona a una investigación, por ejemplo ante «cualquier anomalía de las características sexuales secundarias» es decir, atribuciones físicas como pechos, labios o caderas anchas en mujeres y pelo en el pecho o la espalda en hombres.
Otra de las pruebas es la comprobación del nivel de testosterona para determinar si es hombre o mujer.
Es necesario señalar que quien se oponga a realizarse la verificación de sexo, es sancionada e incluso pueden expulsarla de la competición.
Cabe destacar la contradicción con su Artículo 3 en el cuál manifiestan: «está prohibida la discriminación de cualquier país, individuo o grupo de personas por cuestiones de raza, color de piel, su origen étnico, nacional o social, sexo, lengua, religión, posicionamiento político o de cualquier otra índole, poder adquisitivo, lugar de nacimiento o procedencia, orientación sexual o por cualquier otra razón, y será punible con suspensión o exclusión».
También recordamos que en el año 2004 el el expresidente de la FIFA, Joseph Blatter, considerado como el “padrino” del fútbol femenino, declaró a un diario siuzo que las jugadoras vistieran ropa más ajustada, y así atraer mayor publicidad el justificativo sería que “hay muchas mujeres guapas jugando al fútbol”.