«No pensaba escribir una novela, pero tenía un borrador hace tiempo con una historia de mujeres», cuenta Anahí, una escritora y docente de nuestra ciudad, sobre esta su primera novela. Inspirada en muchas historias que le han contado, pero sobre todo en los relatos de su abuela, que hablaba poco y casi no sabía escribir, pero para ella era la mejor narradora del mundo.
Una vez le contó que a los 14 años la habían obligado a casarse con un hombre que a penas conocía, porque en su casa sobraba una boca, además se ser mujer, lo cual hasta hace no mucho tiempo significaba estar destinada a hacer lo necesario, para evitar un problema más a la familia.
«La Niña del Mar» refleja a muchas otras historias y obedece a algunas obsesiones personales en cuanto a determinadas cuestiones que la angustian, como el despertar sexual de las niñas, que al ser cada vez más precoz, disminuye el tiempo de infancia y el tiempo de inocencia, precipitando también algunas pequeñas situaciones cotidianas de violencia simbólica de las que las niñas suelen ser víctimas, y no siempre saben qué hacer cuando eso ocurre.
Anahí comenta que cuando escribe siempre se toma el tiempo necesario para trabajar las ideas. Aunque su escritura fluye generalmente rápido, considera que es bueno tomarse el tiempo para corregir e ir encarando los relatos de la mejor manera posible. «También hay que leer mucho», dice, para que «ese mundo de la ficción sea coherente y verosímil». A veces «se duda mucho también, porque construir personajes que sean humanos y no sean estereotipos a veces no resulta tan fácil».
«Tengo mucha imaginación y tengo el alma de maestra», dice Anahí, respecto al modo de encarar sus libros, entre los que hay varias ediciones de poesía y ahora esta novela. De este modo, cuando termina de escribir y se dispone a editar, va siempre con la idea completa, que incluye también la parte gráfica y su diseño. En este caso, la tapa está ilustrada por Dana Troncozo, una joven artista de Plottier. La tapa surge, en parte, de un sueño que tuvo: «estaba sentada en una roca cerca del canal grande y alrededor habían caracolas». Y el concepto se completa luego, al visitar un museo y enterarse de que «las caracolas eran utilizadas para comunicarse».
La presentación de «La Niña del Mar» es este jueves 8 de junio a las 20.00 en Casa de la Cultura. Allí habrán invitadxs varixs, para realizar lecturas y se podrá escuchar a la agrupación coral Voces del Cumelén, además del brindis y la degustación que propone la bodega Krusha.