Tras una nueva balacera, los padres y madres de la Escuela nº 357 decidieron tomar el establecimiento. Esta vez no solo impidieron la entrada a sus hijos, sino también a los docentes y porteros.
Jannet, madre de la comunidad educativa, expresó que, hasta que no se empiece con el proyecto del paredón que impediría que las balas lleguen a la escuela, no se van a mover de allí. Así mismo, desmiente la idea de que hay seguridad y policía en el lugar:
«Dicen que hay mucha seguridad, que está la policía, y es mentira porque si ustedes vienen al establecimiento pueden ver que hay un solo policía y en el horario escolar no hay nadie.»
Escuchá la nota completa a Jannet aquí.
Foto extraída de la web.