El presidente Evo Morales presentó este domingo su renuncia al cargo para que los dirigentes del MAS y los movimientos sociales no sean hostigados. Lamentó el golpe de Estado con violencia y aseguró que continuará con su lucha por la igualdad
El vicepresidente Alvaro García Linera comunicó también en la misma conferencia su decisión de renunciar al cargo y dejar el mando de la Asmablea Legislativa Plurinacional. Tras el anuncio en La Paz reventaron petardos y sonaron las campanas en algunas zonas de la Sede de Gobierno.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este domingo su dimisión del cargo tras oleada violenta perpetrada por grupos opositores que desconocen los resultados electorales efectuados el pasado 20 de octubre.
“Decidí renunciar a mi cargo para que Carlos Mesa y Luis Camacho, dejen de maltratar y perjudicar a miles de hermanos (…) Tengo la obligación de buscar la paz y duele mucho que entre bolivianos nos enfrentemos, por esta razón envío mi carta de renuncia a la Asamblea Plurinacional de Bolivia”, indicó el expresidente Evo.
Tras fuertes oleadas violentas contra militantes y dirigentes del Movimiento Al Socialismo (MAS), amedrentamiento a periodistas, quema de residencias y traición de aliados políticos y miembros de la Policía Nacional, el país padece una crisis política.
En un comunicado, las Fuerzas Armadas (FF.AA.) indicaron que para recuperar la estabilidad de la nación, es necesario un cambio en la presidencia, “sugerimos al presidente que renuncie a su mandato permitiendo la pacificación y mantenimiento de la estabilidad de Bolivia”, dijo el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, William Kaiman.
“Estamos renunciando para que nuestros hermanos humildes dejen de ser pateados (…) familias pobre, humillados, no queremos que haya enfrentamientos. Hemos decidido renunciar a nuestro triunfo para que haya elecciones, todo por Bolivia, todo la Patria”, manifestó Morales
Asimismo, derrumbó rumores divulgados por grupos ultraderechista de una posible salida del país, “no tengo por qué escaparme, no me he robado nada, si alguien piensa que hemos robado que presente una prueba”, agrega.
Por su parte, el exvicepresidente, Álvaro García, reseñó que el Gobierno renuncia para cesar la violencia y recordó la recuperación de la soberanía Nacional y la dignificación de derechos, “somos el Gobierno que nacionalizó los hidrocarburos, el Gobierno que sacó de la pobreza a más de 3 millones de ciudadanos”, agregó.
Morales deja un país con altos índices de desarrollo humano, garantizando los derechos fundamentales de la población y con un crecimiento económico de 4,5 por ciento, según Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Evo sufrió el desmoronamiento de su gabinete tras masivas renuncias como los casos del viceministro de Turismo, Marcelo Arze; la presidenta del Tribunal Supremo Electoral, María Eugenia Choque; la ministra de Planificación, Mariana Prado; así como el senador electo por el Potosí, René Joaquino; el gobernador Juan Carlos Cejas y el alcalde Williams Cervantes, por el departamento.
Aunque el expresidente boliviano llamó a organismos internacionales como Naciones Unidas (ONU) y la Organización de Estados Americanos (OEA) auditar los resultados electorales y convocó a todos los sectores sociales a una Mesa de Diálogo, grupos ultraderechistas se mantuvieron desplegados en las calles agrediendo a la población.
“No es ninguna traición a los movimientos sociales, la lucha sigue, somos pueblo. Hemos liberado Bolivia, estamos dejando una patria liberada, en desarrollo con generaciones que tienen mucho futuro”, conluyó Evo.
Fuente:Telesur