El hecho ocurrió el viernes en el CEM 116 cuando dos porteros sufrieron una descompensación a raíz de una pérdida de gas. Las clases fueron suspendidas y la empresa Camuzzi retiro el medidor hasta tanto se realicen las obras de reparación pertinentes.
El hecho sucedió el viernes en el establecimiento donde funciona la Escuela 116 y el CENS 22 nocturno, «con serios problemas respiratorios para los trabajadores que, si bien fueron dados de alta, siguen físicamente comprometidos» denunció ATE.
“Estamos muy preocupados y consternados. Esta situación podría haber tenido un trágico desenlace alcanzando también a alumnos, docentes, directivos. No se puede trabajar sin las condiciones de seguridad mínimas”, señaló el secretario gremial de la seccional Alto Valle Este de ATE, Omar Orellana.
Luego de la descompensación, personal de la empresa Camuzzi verificó lo que al momento era sólo una sospecha y detectó varias pérdidas de gas en el establecimiento, por lo que procedió a retirar el medidor.
Hoy no hay clase en ninguno de los turnos de la escuela y desde ATE anticiparon que hasta que no estén aseguradas las condiciones de trabajo, los porteros no garantizarán servicios.