Agustina tiene 28 años y esperaba su primer bebé para el 12 de octubre. Fue al hospital Francisco López Lima, donde le recomendaron que fuera a su casa porque todavía no tenía la suficiente dilatación. Las visitas se sucedieron dos veces hasta que llegó el momento que su hijo naciera.
Fue allí que comenzó una odisea por los hospitales de tres localidades: Roca, Allen y Regina.
En diálogo con Antena Libre, Agustina relató que el médico de guardia no estaba en Roca y que debía dirigirse a Allen, pero en ese nosocomio le informaron que debía volver a Roca, ya que el médico estaba en una urgencia.
Las horas fueron pasando y aumentando la dilatación que para este momento llegaba a 5. La sorpresa fue, dicho profesional tampoco se encontraba en el hospital de Roca y la derivaron a Regina.
“Ese fue otro problema porque no había ambulancia y tuve que esperar una hora que llegara y me enviaran a Regina”, relató la madre.
Finalmente el bebé nació en buen estado de salud en Regina y hoy ya tiene dos semanas de vida.
“Gracias a Dios todo terminó bien, pero se de casos en que los bebés pueden morir o quedar con serias secuelas por la demora en el parto. En mi caso terminó bien, pero esto no puede seguir pasando. Hoy haré una denuncia en el Juzgado para que esto no siga pasando en los hospitales públicos”, afirmó la mujer
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