El economista Julio Gambina analizó el impacto de los resultados electorales en la economía argentina y advirtió que, pese al revés en las urnas, el gobierno de Javier Milei ratifica el rumbo económico acompañado por el respaldo explícito del FMI.
Según Gambina, las políticas de ajuste continúan generando un fuerte retroceso en el consumo popular, afectando jubilaciones, salud y educación. A la vez, la apertura de importaciones impacta sobre la industria, con cierres de empresas, caída de la actividad y pérdida de empleos. “El consumo que crece es el de los sectores de altos ingresos, mientras la mayoría ve cómo disminuye su capacidad de compra”, señaló.
El economista cuestionó además la desregulación aplicada en distintos sectores, como pasaportes y patentes, que —según dijo— favorece a grandes empresas y perjudica a usuarios y pymes.
De cara al futuro, anticipó un posible aumento de la protesta social, ante la persistencia del malestar económico y los rumores de una nueva devaluación. “Lo que hay que cambiar no es la moneda, sino la política económica”, concluyó.